Los Hawks vuelven a Playoffs y firman la décima
- Miguel Cobas
- 9 abr 2017
- 2 Min. de lectura
Los de Mike Budenholzer confirman su presencia en la postemporada por décima temporada consecutiva en una campaña marcada por los altibajos de juego y resultados. Se pelearán con Milwaukee por la quinta plaza del competido Este.
Paul Millsap tira a canasta en el partido clave frene a Boston. Fuente: nba.com
Si hay algún adjetivo para calificar la temporada de los Atlanta Hawks, a cualquiera se le puede venir a la cabeza la palabra irregularidad. Una gran primera parte de año, en la que luchaban de tú a tú contra cualquier rival en el Este y un tramo final de crisis en el que la posibilidad de quedarse fuera de los Playoffs rondó la cabeza de los aficionados de los Halcones.
La temporada no pudo empezar mejor. 14 victorias en los 18 primeros partidos entre octubre y noviembre que los situaba líderes de conferencia y unas sensaciones muy positivas. Pero todo lo que sube baja. Y eso mismo pasó con el equipo. Después de esa maravillosa racha de inicio, la dinámica se truncó y sumaron 10 derrotas en los siguientes 11 partidos entre noviembre y diciembre, lo que les bajó de la cabeza de la conferencia. Ya definitivamente.
A partir de ese momento los resultados se estabilizaron. Una serie de movimientos en los despachos se llevaron al triplista Kyle Korver a Cleveland a cambio de otro especialista desde la larga distancia, Mike Dulneavy Jr. El otro gran traspaso que firmaron los de Georgia en enero fue la llegada del turco Ilyasova a cambio de un lesionado Splitter. Con esta nueva plantilla el equipo consiguió la estabilidad necesaria, estando siempre por encima del 50% de victorias en los siguientes meses.
Cuando todo parecía tranquilo y con el equipo funcionando bien, especialmente sus tres figuras ofensivas: Denis Schroeder, Paul Millsap y Tim Hardaway Jr, promediando más de 18 puntos por partido los dos primeros y 14 el tercero, llegaron las lesiones y con ellas los malos resultados.
Los titulares Millsap y Bazemore cayeron al empezar marzo. El equipo no supo reaccionar, la buena dinámica se volvió negativa y el fichaje de Calderón no aportaba a la plantilla. Su posición de Playoffs se veía peligrar por primera vez en años, ya que sumaron 9 derrotas en los siguientes 11 encuentros. Sus rivales por la octava posición apretaban, pero no conseguían ser regulares, lo que permitió a los de Budenholzer mantenerse siempre entre los ocho primeros clasificados. El Ala-Pívot Paul Millsap se recuperó rápidamente consiguió aportar muy buenos números desde el banquillo (26 puntos y 12 rebotes en la victoria frente a Boston).
La victoria ante Cleveland (sin Schroeder, Millsap, Howard o Bazemore) y la derrota de Chicago en Brooklyn certifica el billete para sus décimos Playoffs consecutivos, segunda mejor registro de la actual NBA, aunque a años luz de las 19 de San Antonio.
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