Vuelve el Show-Time a LA?
- Alejo Afonso
- 24 jun 2017
- 2 Min. de lectura
Los Ángeles Lakers sueñan con volver a lo más alto de la NBA y para eso seleccionaron a Lonzo Ball, el base proveniente de UCLA, que trae consigo una gran responsabilidad de guiar a la franquicia de nuevo a su época de gloria.

Lonzo Ball, nueva esperanza de Los Lakers. Fuente: Infobae
Luego del primer workout de Lonzo Ball semanas atrás, se dijo que el conjunto angelino no quedo satisfecho con su forma física y por poco tiempo se dudó a quien elegirían. Pero al hacer otro entrenamiento más junto al equipo, las dudas se disiparon, el futuro estaba en el base de 1,98mts y 86kg, que promedió como freshman en la universidad: 14,6 puntos, 7,6 asistencias y 6,0 rebotes por partido, liderando el país en asistencias y llevando a su equipo a ser el mejor anotador.
Ball es un jugador con mucho potencial ya que posee una gran visión de juego y una gran creatividad a la hora de resolver jugadas, además de estar al lado de Magic Johnson en la franquicia, de quien tendrá bastante por aprender e incorporar. El Hall of Famer y ex Laker asimilo el juego de Lonzo al de él o al de Jason Kidd y declaró: “Tiene un increíble IQ y capacidad de liderazgo. Lo tiene todo”. Además de tener un muy confiable tiro de tres puntos y una mecánica inusual pero muy rápida que lo llevo a promediar 41,2% en la universidad.
Parece que Los Ángeles han encontrado al jugador correcto para guiar al equipo, el joven de 19 años aseguró que será protagonista en la franquicia y dijo antes ser elegido: "Los Lakers deben draftearme porque necesitan un líder. Yo lo soy. O se nace líder o no lo eres”.
Junto con la llegada de Lonzo viene su padre, Lavar Ball, ya conocido por su importancia en la carrera de sus hijos, su aparición en los medios y su confianza y soberbia acerca de que sus hijos son los mejores. Lavar, que había dicho que su hijo es el mejor del mundo, no tardó en dar su presencia en la ceremonia del draft y aclaró que él siempre supo que su hijo iría a LA y depositó toda la confianza en él: "Lonzo llevará a los Lakers a los playoffs en su primer año".
Esto no parece tan lejano ya que con la gestión de Rob Pelinka junto a Magic Johnson las cosas en Los Ángeles parecen tener un buen futuro. El primer movimiento de la franquicia en el verano fue el traspaso que involucró la llegada de Brook Lopez y la elección 27 del pasado draft y la retirada de D’angelo Rusell, haciendo lugar en la base para Lonzo, y de Timoféi Mozgov, para crear espacio salarial ya que el pívot cobraba 54M.
Con esto la franquicia angelina consigue un referente en la pintura como lo es Lopez, libera el puesto de base para Lonzo y genera espacio salarial para soñar con la adquisición de Paul George, quien es agente libre la próxima temporada y declaró que le gustaría vestir la purpura y oro. Esto sumando la presencia en el equipo de promesas como Jordan Clarkson, Julius Randle, Larry Nance Jr, Ivica Subac, David Nwaba y Brandon Ingram, pick n°2 de la temporada pasada, los ciudadanos de Los Ángeles tienen con que soñar.
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